Los oasis, son un paraje aislado en la parte del algún desierto, donde se encuentra agua y vegetación. Para muchas personas esto es un milagro de la naturaleza, ya que no son muchos los que existen en el mundo y además muchos de estos son para abastecer a los habitantes del mismo oasis o también para recibir a los que pasan cerca del lugar. Todas estas características resumen a la Comunidad Gen, ubicada en el kilómetro 1.381 a veinte minutos en vehículo de la ciudad de Antofagasta a 560 metros sobre el nivel del mar. Y a pesar de toda esta maravilla natural, es muy poco conocida en la región.
Esta corporación, tiene como principal objetivo demostrar con hechos que se pude construir y desarrollar métodos, a base de los recursos que provee la naturaleza como el viento y el sol combinados con tecnología, una vida autónoma en el medio del desierto. Con lo que se formaría, según ellos, una perfecta armonía y conservación de estos recursos y el ser humano. Así se incrementaría el desarrollo ecológico que tanto le hace falta a la región, que no aprovecha el clima que a veces es extremo, pero que tiene muchas ventajas.
Su lema, según una de las precursoras de este oasis Blanca Meneses, es amar la vida en todas sus manifestaciones y vivir el sentido de gratitud que les ha servido para haber creado gen, junto con la perseverancia de sus socios. Todo esto se ve reflejado en el letrero de entrada al recinto, donde una frase destaca todo el objetivo y es espíritu de todos los integrantes: “¡Cual despertar de semilla descubramos la vida que antes del Big Bang se preparó para nosotros! En ella el amor invisible, es visible.
Esta aldea ecológica se compone por los implementos necesarios para las investigaciones de medio ambiente, como lo son los paneles y cocinas solares, turbinas eólicas y aguas subterráneas. De todo esto, obtienen electricidad, donde hasta pueden utilizarla para ver televisión, ya que tienen un generador que transforma para usar la energía recogida hasta en computadores.
Carolina Rojas V.
Esta corporación, tiene como principal objetivo demostrar con hechos que se pude construir y desarrollar métodos, a base de los recursos que provee la naturaleza como el viento y el sol combinados con tecnología, una vida autónoma en el medio del desierto. Con lo que se formaría, según ellos, una perfecta armonía y conservación de estos recursos y el ser humano. Así se incrementaría el desarrollo ecológico que tanto le hace falta a la región, que no aprovecha el clima que a veces es extremo, pero que tiene muchas ventajas.
Su lema, según una de las precursoras de este oasis Blanca Meneses, es amar la vida en todas sus manifestaciones y vivir el sentido de gratitud que les ha servido para haber creado gen, junto con la perseverancia de sus socios. Todo esto se ve reflejado en el letrero de entrada al recinto, donde una frase destaca todo el objetivo y es espíritu de todos los integrantes: “¡Cual despertar de semilla descubramos la vida que antes del Big Bang se preparó para nosotros! En ella el amor invisible, es visible.
Esta aldea ecológica se compone por los implementos necesarios para las investigaciones de medio ambiente, como lo son los paneles y cocinas solares, turbinas eólicas y aguas subterráneas. De todo esto, obtienen electricidad, donde hasta pueden utilizarla para ver televisión, ya que tienen un generador que transforma para usar la energía recogida hasta en computadores.
Carolina Rojas V.
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